La flor de no me olvides

El nombre científico en latín es Myosotis, que significa Orejitas de ratón, pero la rica imaginación del pueblo las bautizó como Nomeolvides.

Escrito por Enrique Salvo Tierra

En las praderas húmedas de nuestro entorno habita una pequeña planta que destaca por sus apiñadas florecillas de llamativos pétalos azul cielo que confluyen en una cautivadora estrella de amarillo fulgurante. El nombre científico en latín es Myosotis, que significa Orejitas de ratón, pero la rica imaginación del pueblo las bautizó como Nomeolvides, porque en su humilde belleza te impregnan un recuerdo imborrable. Cuando podamos volver a la normalidad, si tuviese que elegir un emblema para lucir en la solapa sería una flor de Nomeolvides. El fúnebre lazo negro rememora la tristeza en momentos en donde se pide homenajear los mejores momentos que convivimos con los que se fueron, sus empeños y sus logros, sus desvelos y enseñanzas. Pero además la flor de myosotis debe servir para que no olvides tantísimas experiencias como las que hemos vivido durante este confín del tiempo.


Para que no olvides el sobrecogedor silencio urbano de estos días que ha sorprendido hasta a la propia Naturaleza, invitándola a pasear por calles de forma tan incauta que podrá ser una trampa inesperada. Para que no olvides que este fue el momento histórico del salto a la socialización de las nuevas tecnologías y la puesta a prueba de si estamos preparados para esta ampliación del castigo divino. Para que no olvides a los maestrillos liendres que afirmaban con insulsas sentencias que él ya lo sabía o que él ya lo dijo, agoreros que suelen errar tanto gracias a que la verdad huye de ellos, en suma que es preferible al sabio por conocer que a los locos conocidos. Para que no olvides que el odio es una mala semilla que sólo hace crecer a la cizaña cuando lo que se requiere es la armonía en el huerto de la convivencia. Para que no olvides que la mejor religión es la educación para la ciudadanía.


Para que no olvides que la universalidad del estado del bienestar es la mayor garantía de que los servicios públicos de salud, educación, seguridad, empleo y cultura sean la base de una sociedad más justa, solidaria y sostenible, a la que ahora todos más que nunca estamos obligados a defender. Y lo más importante, para que no olvides que crisis como estas, ya sean por una pandemia o por el cambio climático, volverán a repetirse.


En el Jardín de FraterniLab, que hoy ha abierto sus puertas virtuales, podemos observar que lejos de ser vegetales las plantas que nos acompañan forman parte de nuestra historia personal, y que de ellos dependemos para un futuro de que aún tenemos mucho que aprender.

Cuidemos la naturaleza